Cómo cuidar la ropa infantil de punto durante el invierno

Para cuidar la ropa de punto de los más pequeños de la casa debemos prestar mucha atención y llevar a cabo algunos pasos cruciales, como vamos a exponer a continuación. Sin duda, la ropita de lana les mantiene más protegidos del frío, además de otorgarles la comodidad que necesitas, debido a que es elástica, además de hipoalergénica.

Los cuidados de la ropa de punto para el invierno

La ropa de punto para invierno es la mejor opción para nuestros hijos pequeños, sobre todo porque les abriga perfectamente bien, además de estar tejida en lana hipoalergénica, que les evita cualquier reacción que afecte a su sistema inmunitario.

Entre los beneficios del punto cerrado, además de protegerles del frío, está la capacidad de permanecer más limpio que otro tipo de tejidos. Esto hace que se adhieran menos microorganismos que puedan deteriorar su salud. Pero llega un momento en que es necesario que lavemos esas prendas, que no dejan de ser más resistentes a la suciedad que otras.

Para limpiar la ropa infantil de punto no es preciso que lo hagamos a mano. Además, durante la época invernal, puede ser muy molesto tener que exponernos al agua tan fría. Sin ningún problema podemos hacer uso de la lavadora, siempre que cumplamos con unos pasos fundamentales para la correcta conservación de la ropita de nuestros pequeños.

El paso a paso para lavar la ropa de punto de nuestros hijos

Aunque muchas lavadoras nos marcan el tipo de lavado en función del material de la prenda, lo más recomendable es que usemos un programa apto para ropa delicada. No debemos olvidarnos de darle la vuelta a toda la ropa que vayamos a meter en este electrodoméstico, a fin de evitar que puedan formarse esas antiestéticas bolitas.

También debemos tener cuidado a la hora de elegir el detergente y el suavizante. Siempre podemos encontrar en el supermercado el producto más apropiado para lavar estas prendas tan delicadas.

Si podemos meter en una bolsa especial para lavar cada una de las prendas de punto, de manera individual, conseguiremos una mejor conservación de esta. A la hora de extenderla, puesto que el uso de la secadora está completamente desaconsejado, vamos a intentar secarla con ayuda de una toalla, sin deformarla. Debe quedar tendida horizontalmente, preferiblemente en el exterior, para facilitar que el agua se evapore de manera natural.

Tampoco deben darle los rayos del sol directamente, ya que podría decolorarse, además de que termina afectando la integridad del tejido. El secreto es tener paciencia y nunca usar perchas, que puedan deformar esta ropa de punto, tan delicada a pesar de ser de muy buena calidad.

Cuidar la ropa de punto de los más pequeños es algo sencillo, con seguir unos pocos pasos aseguramos que pueda usarse durante años e, incluso, permanezcan toda la vida.